Un ochomil sin barreras

Hoy miramos hacia uno de esos techos de 8.000 metros, el Manaslu. Es la meta, el objetivo, del proyecto deportivo y humano que está preparando nuestra invitada Vanessa Almeida. Ella es ante todo una deportista de élite. Comenzó a navegar con apenas 9 años de edad en el Club Náutico de Vitoria, en el pantano de Ulibarri. Así es como arrancó una extensa y exitosa carrera de regatista profesional de vela. Vanessa recuerda para Vivir para Ver cómo llegó incluso a preparar la cita olímpica de Sídney 2000, por lo que el Consejo Superior de deportes le concedió la medalla al  mérito deportivo. Ella llegó a trabajar también en Vela adaptada siendo entrenadora del equipo paralímpico español para Londres 2012.

Tras su retirada su vida dio un giro importante, y no solo por abandonar la competición. Hace tres años le detectaron un autismo de Alto funcionamiento, es Asperger de Altas Capacidades y con ello ha sentido tranquilidad. Con este diagnóstico entiende y comprende muchas cosas que le han ocurrido y angustiado durante toda su vida. Hablaremos de ello con ella.

Pero además Vanessa quiere presentarnos su pasión más reciente, el montañismo. Así es como se ha embarcado en un proyecto de Alpinismo de envergadura, porque se ha fijado el objetivo de escalar un ocho mil, el Manaslu, formando cordada con alpinistas como Juan Vallejo. Se ha rodeado de un equipo técnico de envergadura que le asesoran en la preparación de este reto deportivo, personal y científico.

Quiere ser la primera persona, mujer con TEA que consigue coronar un 8.000. Y en este viaje le acompañan preparadores físicos, psicológicos y científicos sobre Fisiología del Deporte y Altitud, con Aritz Urdampilleta y de Nutrición Deportiva, con científicos de la Universidad Miguel Hernández de Elche, liderado por el Dr. Enrique Roche.

El proyecto lo han denominado 8.000 sin barreras y se puede colaborar haciendo aportaciones a través de la plataforma de crowfounding abierta