"Las sectas están muy presentes en la universidad y el deporte"

Hace ya tiempo que los expertos alertan de un considerable aumento de las sectas, durante los últimos 20 años. Desde el comienzo de la pandemia, utilizando su arma más poderosa, el miedo, han crecido notablemente y en ámbitos distintos a los habituales. La palabra secta comenzó a utilizarse en el siglo XIX en el ámbito de la sociología, y se sitúa en el campo de la religión. Pero, las sectas del siglo XXI funcionan de otro modo y el licenciado en Teología y exsacerdote, Luis Santamaría, imparte formación a las fuerzas y cuerpos de seguridad sobre el nuevo modus operandi de las sectas.

En “Boulevard Magazine” hablamos con una de las personas que más sabe sobre este tema, y que lleva más de 20 años investigándolo. Explica que muchas veces en los medios va ligado a cuestiones anecdóticas, graciosas, para muchos resulta friki, pero, que hay una historia detrás de muchas décadas de sufrimiento y manipulación de gente cuyas ideas han sido destrozadas por un grupo totalmente sectario, que anula su personalidad y ha acabado con su libertad.

Durante la cuarentena, “dieron un salto bestial y utilizaban simplemente las redes sociales y los grupos de WhatsApp para difundir reuniones físicas, talleres, charlas a través de Zoom, Youtube o cualquiera de los nuevos medios, y muchas veces sin mostrar realmente quienes son” cuenta Santamaria.

Además, revela que las sectas eligen a las personas, no les vale cualquiera. ”Una persona que se vuelque, que sea capaz de dedicar su vida a un ideal, a unas personas, a algo que está convencido que hará bien al mundo, o alguien que tiene estudios, es una persona ideal para las sectas ”. Y ese tipo de gente se encuentra en las universidades, en el ámbito deportivo o incluso en conservatorios. Impartiendo charlas, sin decir quienes son, con un nombre bonito. Es el caso de Nuevo Acópolis que imparten talleres, cursos, etc, con otro nombre, pero con el mismo objetivo.

Su modus operandi siempre suele ser el mismo, como su estructura: “Sus técnicas de captación y de manipulación y de adoctrinamiento van dirigidas a vencer eso, a desgastar tus relaciones anteriores, esos vínculos que tienes con la familia y amigos y desgastar ese sentido crítico, porque en lugar de entrarte por el cerebro, por lo racional, te entran por lo emocional”.