La oposición critica al Gobierno por "abandonar a su suerte" al sector hostelero

Los parlamentarios de la CAV han analizado, en el debate político del programa Parlamento en las Ondas de Radio Euskadi, el impacto de la pandemia y el cierre de bares y restaurantes decretado desde hoy.

Los partidos de la oposición han criticado las ayudas ofrecidas por el Gobierno Vasco al sector de la hostelería, por ser "insuficientes", mientras las formaciones que conforman el Ejecutivo han valorado la eficacia del "plan de resistencia" presentado y han rechazado que se haya dejado "abandonados a su suerte" a los hosteleros.

El parlamentario de EH Bildu Iker Casanova ha señalado que las ayudas ofrecidas desde el Gobierno Vasco a la hostelería son "insuficientes" y "no llegan para nada". "Es como si alguien viene con un brazo colgando y se le da una tirita", ha alertado.

Tras recordar que el sector hostelero ha calificado de "humillante" el trato recibido desde el Ejecutivo, ha indicado que, a día de hoy, "la única ayuda en vigor son créditos" y "no hay ayudas directas".

Asimismo, ha rechazado que la situación generada no se pudiera prever y ha considerado que el "grave error" ha sido no tomar medidas con carácter previo, por lo que "el Gobierno llega tarde". 

"A 65.000 personas del sector se les ha mandado a casa, los asalariados entrarán en ERTE si pueden y el resto no tendrán ayudas, y esto es algo que no era difícil de prever", ha añadido.

Casanova asegura que la hostelería "necesita un plan" y ha criticado que el Gobierno Vasco desconoce las necesidades reales del sector, a pesar de que "no ha sido una situación sobrevenida". "Llevamos desde septiembre hablando de la necesidad de que las medidas restrictivas vengan acompañadas de medidas económicas de manera inmediata", ha dicho Casanova.

Por su lado, el representante de Elkarrekin Podemos Jon Hernández ha pedido que las medidas que se tengan que adoptar contra la pandemia vayan acompañadas de medidas "potentes, para que no empobrezcan a la población, y ahí el Gobierno está fallando".

"Hay que hablar de deuda y de reformas fiscales que llevamos reclamando desde hace mucho tiempo. Desde el Departamento de Economía y Hacienda, cuando se plantean medidas económicas, siempre responde que se pide demasiado dinero", ha lamentado, para resaltar que "aunque ha habido una serie de millones para ayudar a la hostelería, toca a 600 euros por negocio, y eso no da".

En este punto, ha precisado que "no se trata solo del sector de la hostelería, hay proveedores que van a sufrir un impacto potente con este cierre, así como el sector de la cultura".

Además, ha recodado que Urkullu convocó elecciones en julio porque "sabía que la segunda ola iba a estar en invierno", y se ha preguntado que si ya se preveía que se iba a tener que cerrar la hostelería, "¿cómo no ha habido una previsión para este sector concreto y para los sectores de alrededor?".

Asimismo, ha preguntado dónde están los informes concretos para, con datos, decir "qué grado de transmisión se da en este tipo de locales o en otros sitios", para lamentar que en el transporte "vamos como sardinas en lata, hombro con hombro". "Si queremos cortar la trasmisión del virus, tiene que ir acompañado de que la gente llegue a fin de mes, y eso está fallando", ha concluido.

Desde la coalición PP+CS, su parlamentario Carmelo Barrio ha advertido de que "algo falla", ya que el lehendakari "sale anunciando medidas restrictivas, pero no dice nada de medidas de apoyo, que tienen que ir a la vez", al tiempo que ha lamentado que el diálogo con las asociaciones de hosteleros "no está funcionando", lo que haya dado lugar a la convocatoria de manifestaciones, por los "desesperados que están".

"Los afectados exigen ayudas directas al sector", ha recordado, para destacar que "el Gobierno Vasco tiene que dar confianza y certidumbres,  y no da ninguna". "Las asociaciones de hostelería han cuantificado una cantidad, hay que analizar sobre esas cuestiones y hay que hablar con ellos", ha agregado.

Por su parte, la parlamentaria de Vox Amaia Martínez ha reclamado ayudas directas "ahora" para la hostelería, porque "tiene que comer este mes".

Además, ha preguntado por la base científica en la que se ha basado el Gobierno para cerrar solo la hostelería, ya que "en Madrid ha mejorado (la cifra de contagios) y no se han cerrado bares, mientras en Cataluña se han cerrado bares y no se ha mejorado".

Partidos del Gobierno

Por su parte, la representante del PNV Leixuri Arrizabalaga ha afirmado que "ante una situación complicada de gestionar" como la que supone la pandemia, se debe "buscar un equilibrio entre el bien mayor y el mal menor".

Tras señalar que las medidas adoptadas se han asumido como consecuencia de la transmisión comunitaria que se da y el impacto en los hospitales, Arrizabalaga ha incidido en la necesidad de romper con la cadena de transmisión de contagios.

"Era el momento de tomar unas medidas que son duras", ha afirmado, para añadir, no obstante, que la hostelería no es "culpable" de la situación generada, por lo que "no se debe estigmatizarla", pero sí es "donde hay más riesgo de contacto social" se produce.

Además, ha destacado el "plan de resistencia" planteado por el Ejecutivo, que asciende a 45 millones de euros, "con 15 millones extra, y hay que poner sobre la mesa nuevas medidas de cara a la nueva situación". "Hay que dar respuesta a esas reivindicaciones de las asociaciones de hosteleros y deben ser eficaces y coordinadas", ha añadido.

Por su parte, el portavoz parlamentario del PSE, Eneko Andueza, ha afirmado que entiende la gravedad que supone el cierre de bares y las consecuencias que tiene en el sector, pero ha subrayado que el Gobierno Vasco ha puesto "medidas y herramientas encima de la mesa".

"No se puede decir que se ha decretado un cierre, así como así, sin hacer nada. Hay un plan de resistencia con 45 millones, de los que 30 están destinados para ayudas extraordinarias, 8 millones a ayudas ordinarias adaptadas a la nueva situación y 5,7 millones destinados a bonos de consumo", ha enumerado.

Por todo ello, ha considerado que no se puede decir que se deja "abandonados a su suerte" a los hosteleros y ha afirmado que esos 45 millones iniciales está previsto que se incrementen en otros 15 millones y "se valoran más ayudas para paliar esta situación".

"Abordar estas cuestiones es complicado y entiendo que se quejen de la lentitud administrativa a la hora de cobrar, pero hablamos de 45 millones de euros", ha reiterado.

Respecto a las reclamaciones del sector, Andueza ha insistido en que el consejero ha mantenido reuniones "constantes" con las asociaciones de hostelería y se están buscando "soluciones y puntos de encuentro". "En todos los sectores nunca ninguno obtiene el 100 por 100 de lo que reclama, porque siempre se dispara por elevación", ha añadido.