Sociedad
INFORME
Más de 80 000 personas trabajadoras se encuentran en situación de pobreza en Hego Euskal Herria
IDOIA ALBERDI ETXANIZ | EITB MEDIA
Son personas con empleo y cuyos ingresos se sitúan por debajo del umbral de pobreza. Navarra es la comunidad autónoma con menor tasa de pobreza laboral (6,3 %) en el Estado español.
-
Gente en Bilbao. Foto de archivo: EITB Media.
Euskaraz irakurri: Hego Euskal Herriko 80.000 langile baino gehiago bizi dira pobrezia egoeran
"Llegamos muy justos a fin de mes y pidiendo préstamos, créditos y largando la agonía. Aunque suene muy triste, con mi trabajo estamos comiendo los cuatro. Mi mujer lleva en paro muchos años. Vamos tirando día a día. Hemos renunciado a muchas cosas, a salir con amigos...". Es el testimonio de una persona trabajadora de 54 años que refleja la realidad detrás de la pobreza laboral: trabajar y no ganar lo suficiente para poder pagar los gastos más básicos y cotidianos de la vida cotidiana. Una situación en la que se encuentran a día de hoy más de 80 000 trabajadores y trabajadoras en Hego Euskal Herria —61069 en la CAV y 19227 en Navarra, según datos del Instituto Nacional de Estadística—. Destaca la especial vulnerabilidad de los migrantes, de las trabajadoras del hogar y de las familias numerosas y monoparentales.
La organización Oxfam Intermón ha publicado este miércoles la investigación 'Pobreza Laboral: cuando trabajar no es suficiente para llegar a fin de mes', en la que se destaca que Navarra es la comunidad autónoma con menor tasa de pobreza laboral (6,3 %). El segundo lugar lo ocupa la Comunidad Autónoma Vasca (6,3 %). En el conjunto del Estado español la pobreza laboral afecta a casi tres millones de trabajadores (1,7 %)
El informe revela que los sectores más golpeados por la pobreza laboral son la agricultura y el trabajo de hogar, donde tres de cada diez personas viven en pobreza a pesar de tener un empleo. Le siguen, la hostelería y la construcción, con dos de cada diez personas empleadas en situación de pobreza. El 40 % de las familias numerosas y el 30 % de los hogares monoparentales sufren esta situación.
El encarecimiento de la vivienda y de los servicios básicos ha agravado aún más el problema: los hogares en situación de pobreza laboral destinan entre el 67 % y el 79 % de sus ingresos al pago de la vivienda y los servicios básicos, expone la investigación. Asimismo, más de la mitad de los hogares en pobreza laboral (55,3 %) ha tenido que renunciar en el último año a servicios de salud esenciales como tratamientos dentales, gafas o seguimiento psicológico, debido a la falta de recursos.
Según el análisis, a pesar de la creación de empleo, el sistema productivo y el modelo económico siguen generando puestos de trabajo de baja calidad. El informe explica que el empleo a tiempo parcial o el autoempleo condenan a la pobreza a una de cada cuatro personas trabajadoras en estas modalidades.
Seis de cada diez personas en pobreza laboral habrían querido continuar sus estudios, pero el 54 % se vio obligado a abandonarlos por falta de recursos o por la necesidad de trabajar para subsistir. Este ciclo perpetúa la desigualdad, ya que quienes no acceden a una educación superior tienen más probabilidades de conseguir empleos precarios y mal remunerados, indica la ONG.
Andalucía se sitúa a la cabeza de la pobreza laboral con una tasa del 19,4 %, seguida de Extremadura (17,2 %), Ceuta (16,4 %), Castilla–La Mancha (15,4 %), Murcia (14,3 %), Canarias (13,8) y Valencia (13,8 %).