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Sociedad

Final de Copa

Comienza el éxodo rojiblanco hacia Sevilla

EITB Media

Entre 60 000 y 70 000 hinchas del Athletic seguirán la ansiada final desde la capital hispalense, aunque solo la mitad lo hará desde la propia La Cartuja. Ya hay una avanzadilla rojiblanca en Sevilla, aunque la mayoría iniciará su peregrinación entre hoy y mañana.

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Bilbao, esta mañana. Imagen obtenida de un vídeo de EITB Media.

Euskaraz irakurri: Erauntsi zuri-gorria Sevillara bidean da

Vía avión, autobús, tren, vehículo privado, taxi, autocaravana... todo medio de transporte es válido para alcanzar el objetivo: llegar a Sevilla para la final de la Copa del Rey, que disputarán el sábado el Athletic Club y el Mallorca en La Cartuja. La marea rojiblanca ya ha comenzado su peregrinación, que se intensificará mañana, viernes, y el mismo sábado.

Según los cálculos de la Cámara de Comercio de Sevilla, entre 60 000 y 70 000 hinchas del Athletic inundarán la capital andaluza, aunque se cree que solo la mitad cuenta con entrada (el Athletic tenía 20 000 entradas y había otras 10 000 disponibles para federaciones territoriales, clubes y otros compromisos).

A las 07:00 horas, ha partido el primero de los vuelos directos a Sevilla desde el Aeropuerto de Bilbao, y hay otros tres más programados para este jueves, y siete el viernes. El sábado saldrán otros seis vuelos, tres especiales y otros tres chárter. El resto se hará con conexiones con otros aeródromos. Hay quien volará a Marrakech para, desde allí, dirigirse a Sevilla, según han contado estos aficionados a Radio Euskadi (en la imagen). Solo llevan una mochila y no tienen entrada, pero sí mucha ilusión, según han confesado.

Los aficionados que volarán a Marrakech. Foto: Radio Euskadi

Los aficionados que volarán a Marrakech. Foto: Radio Euskadi

El Aeropuerto de Sevilla atenderá más de un centenar de vuelos chárter (54 llegadas y 52 salidas) entre mañana y el domingo con motivo de la final de Copa. Este dispositivo extra ha de combinarse con la operativa habitual del aeródromo por lo que las instalaciones aeroportuarias permanecerán abiertas la noche del sábado al domingo, días en los que se concentrarán las mayores puntas de actividad.

Decenas de agencias y compañías de autobuses han organizado servicios de ida y vuelta a Sevilla. La mayoría de las plazas están agotadas. Hay quién ha ido más allá: cinco aficionados salieron el martes desde Lezama en un autobús clásico londinense de dos pisos. El autocar, que fue puesto en circulación en 1978, fue revisado antes de emprender el viaje.

Uno de los aficionados que ya va camino a Sevilla. Foto: EFE

Uno de los aficionados que ya va camino a Sevilla. Foto: EFE

Renfe también ha reforzado su conexión de tren entre Bilbao y Sevilla, con parada en Madrid. En total, se han dispuesto más de 17 000 plazas, de las que solo queda alguna suelta.

A todo esto se unirán los aficionados y las aficionadas que se acerquen en coche, taxi o autocaravana. Estos últimos vehículos cuentan con diversos estacionamientos en la capital hispalense, entre ellos un solar con capacidad para más de 150 autocaravanas, a escasos cinco minutos a pie de la Athletic Hiria.

Por su parte, el servicio de vehículo compartido BlaBlaCar ha registrado más de 200 viajes desde Bizkaia a Sevilla, cuando lo normal suele ser que no superen la decena. Así, se espera que lleguen a la capital andaluza un 50 % más de viajeros que el fin de semana pasado a través de la plataforma.

La familia rojiblana cuenta, además, con las 60 000 plazas hoteleras disponibles en Sevilla. Desde la Asociación de Hoteles de Sevilla se apunta a un "lleno técnico". "En estos momentos tenemos una ocupación muy alta, como era de esperar y, probablemente, lleguemos a lo que yo siempre llamo 'lleno técnico'. Hay habitaciones, hay camas, pero no hay problema para alguien que quiere encontrarlas. Eso sí, ya van siendo más escasas", aseguran fuentes de la Asociación de Hoteles de Sevilla (AHS).

Las pocas plazas disponibles, eso sí, están por encima de los 200 euros  la noche, aunque la mayoría ronde los 300-400 euros. No es de extrañar que muchos hayan optado por alojarse en las cercanías, e incluso en localidades más al sur.