Sociedad
A favor de la paz
La Contracumbre de la OTAN en Madrid denuncia que la guerra es muerte y destrucción
Agencias | EITB MEDIA
Colectivos españoles han recibido a otros de Alemania, Sudáfrica, Estados Unidos, El Salvador, Cuba o Venezuela, además del Sáhara Occidental, para tratar los temas que más les preocupan en el contexto de guerra en Europa y otros conflictos en el mundo.
Euskaraz irakurri: NATOren Kontragailurrak Madrilen salatu du gerra heriotza eta suntsipena dela
Organizaciones antimilitaristas y pacifistas de varios continentes se han encontrado este fin de semana en Madrid para celebrar la Contracumbre de la OTAN con mesas de debate y una manifestación este domingo para reclamar que "la guerra es muerte y destrucción por generaciones".
El evento quiere proponer una respuesta pacifista para resolver los conflictos del mundo, solo unos días antes de que arranque la trigésimo segunda Cumbre de la Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN) de la semana próxima en la capital española.
Colectivos españoles han recibido a otros de Alemania, Sudáfrica, Estados Unidos, El Salvador, Cuba o Venezuela, además del Sáhara Occidental, para tratar los temas que más les preocupan en el contexto de guerra en Europa y otros conflictos en el mundo.
Para Nora García, integrante de No Cold War (No a la guerra fría) y de la Plataforma por la Paz-OTAN No que organiza las jornadas, este encuentro tiene que contestar a la acción de la OTAN en un momento en el que la organización militarista va a cambiar su hoja de ruta.
"En esta cumbre, la OTAN va a hacer cosas muy importantes, va a cambiar su concepto estratégico, venimos del concepto anterior que es la guerra contra el terrorismo y ahora están cambiando hacia una estrategia que llaman de 360 grados, que es construir un orden al margen de Naciones Unidas", ha dicho la activista.
En esa línea, critica que no se estén tomando medidas para resolver los "grandes problemas de seguridad" que afectan a la ciudadanía.
Evitar la guerra para mantener la paz
García tiene claro que "quien habla por la paz, tiene que evitar la guerra" y tiene que pararla: "Nadie gana una guerra, solo la pierden los pueblos".
Josemi Lorenzo, miembro también de la organización y de la plataforma Desarma Madrid, resalta que la Contracumbre es en realidad "una cumbre por la paz".
Lorenzo reconoce que la OTAN "no es el único factor de desestabilización mundial", pero "es la organización en la que España está directamente implicada".
"Por eso hacemos esta contracumbre, no tanto para oponernos a una gente a la que le reconocemos poco crédito, sino para reivindicar lo que diariamente la sociedad hace desde una vía completamente distinta", añade.
Para Enrique Quintanilla, de Ecologistas en Acción, se está viviendo un avance "tremendo y terrible de la militarización a todos los niveles, gestual, de palabra y de intentos de aumento de gasto militar, una serie de actos que nos están llevando a la ruina ecológica".
Por ello, reivindica una transición ecológica efectiva y rápida, y recuerda que "los ejércitos son de los mayores consumidores y productores de dióxido de carbono, con sus maniobras, sus desfiles... Todo eso lo tenemos que denunciar".
Este pacifista reconoce que a las organizaciones civiles les está costando hacer que su mensaje cale en la sociedad y comprenden que ahora mismo, con la guerra en Ucrania, la población se muestre a favor de la OTAN.
"La pasión de los medios de comunicación está siendo brutal, se nos está metiendo por los poros esa necesidad de quedar bien con la OTAN y la Unión Europea, y a nosotros nos cuesta llegar a la gente, no tenemos muchas posibilidades", concede.
Y es que tiene claro que "entre la OTAN y Vladímir Putin" hay una "tercera vía: el diálogo, la paz, la negociación, salir de políticas antimilitaristas y seguir trabajando por la paz para que la guerra no vuelva a ocurrir dentro de unos años".
Manifestación
Una marcha celebrada este domingo en Madrid ha sido el colofón a la contracumbre contra la OTAN y a favor de la paz. En la manifestación se han podido ver varias pancartas antimilitaristas pidiendo, entre otros, la disolución de ese organismo.