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Coronavirus

La movilidad será libre por toda Euskadi desde el martes

EITB MEDIA | AGENCIAS

El resto de restricciones siguen vigentes, como la limitación de las reuniones a un máximo de cuatro personas y el toque de queda desde las 22:00 horas.

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Un hombre circula en bicicleta por el centro de Vitoria-Gasteiz. Foto: EFE

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El Consejo Asesor del LABI ha decidido levantar el confinamiento municipal y permitir la movilidad por toda Euskadi a partir del martes, 9 de marzo, aunque seguirá estando prohibido entrar y salir de la Comunidad Autónoma Vasca.

Las nuevas medidas entrarán en vigor a las 00:00 horas del 9 de marzo y serán analizadas dentro de 20 días por si tienen que ser actualizadas.

Además, se mantienen otras restricciones como, por ejemplo, el toque de queda a las 22:00 horas, el cierre de la hostelería a las 20:00 horas, el horario máximo de cese de actividades comerciales y culturales (21:00 horas), aforos máximos y la limitación de las reuniones a un máximo de 4 personas.

Tras la reunión, el lehendakari, Iñigo Urkullu, y la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, ha comparecido ante los medios para explicar las nuevas medidas adoptadas por el Consejo Asesor del LABI y hacer un balance sobre la evolución de la pandemia en Euskadi.  

El LABI ha constatado que la situación epidemiológica "ha mejorado claramente", pero ha adviertido de que "la predicción es incierta" por cuatro factores: el riesgo de las nuevas variantes del virus, la ralentización de la tendencia descendente, los repuntes en algunos Países de nuestro entorno y el efecto negativo de procesos de desescalada prematura y relajación social.

En ese sentido, el lehendakari ha destacado que "no es todavía el momento de una desescalada, sino de la máxima cautela" ya que "nos encontramos en un momento crítico y la evolución de las próximas semanas será determinante".

La principal novedad respecto a la actual situación es que se volverá a permitir la movilidad dentro de Euskadi, sin restricciones, algo que no ocurría desde el 13 de enero, ya que dos días antes se decidió el cierre perimetral de los tres territorios vascos.

Preguntado por los periodistas, el lehendakari ha reconocido que han decidido que esta medida entre en vigor el próximo martes para evitar que el lunes pudiera haber un exceso de movimientos con motivo del Día Internacional de la Mujer.

Además, Urkullu ha anunciado que se van a adoptar algunos "ajustes y mejoras puntuales" en distintos aspectos del decreto, como la eliminación de la referencia de la tasa de incidencia acumulada superior a los 500 casos para determinar restricciones dentro de los municipios, lo que permitirá la vuelta de los entrenamientos del deporte escolar en todos los municipos.

Para esta decisión se ha tenido en cuenta que, en estos momentos, ya no hay prácticamente localidades por encima de este registro. Hoy únicamente lo superan Derio, en Bizkaia, y Aretxabaleta y Oñati, en Gipuzkoa.

También se va a incorporar una resolución para regular el desarrollo de las pruebas de las Ofertas Públicas de Empleo y de las actividades de tiempo libre, en un decreto que se publicará el próximo lunes y que entrará en vigor al día siguiente.

El lehendakari ha insistido en que "no es todavía el momento de una desescalada, sino de la máxima cautela". "Nos encontramos en un momento crítico y la evolución de las próximas semanas será determinante", ha dicho antes de recordar que habrá que bajar hasta los 60 casos acumulados para pensar en una "mayor relajación de las actuales medidas".

Por ello, se mantienen vigentes el resto de restricciones como la limitación de personas a un máximo de cuatro, el toque de queda desde las 22:00 a las 06:00 horas, el cese de las actividades comerciales y culturales a las 21:00 horas, los aforos del 40 % en los comercios de más de 150 metros cuadrados y del 60 % en los que no lleguen a esa superficie y la limitación del máximo de aforo en los centros de culto en un 35 %.

Un año desde el inicio de la pandemia

Además, Urkullu ha hecho un balance del primer año de pandemia en Euskadi y ha destacado que la situación "ha mejorado claramente", aunque ha advertido de que la predicción "sigue siendo incierta", por el riesgo de las nuevas variantes, la ralentización de la tendencia descendente, los repuntes en algunos países del entorno y el "efecto negativo de procesos de desescalada prematura y relajación social".

Esa "ralentización" la ha achacado el lehendakari a las consecuencias del auto del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que dejó sin efecto el cierre de la hostelería en los municipios con una alta tasa de contagios.

Ha añadido que hay "muchos meses por delante de respuesta a la pandemia" y ha puesto en valor el comportamiento de los vascos, porque "la gran mayoría de la población entiende, apoya y cumple las medidas adoptadas en cada momento".

"A pesar de la innegable fatiga pandémica y del 'shock' emocional que vivimos, es encomiable la actitud de rigor y correspondabilidad que está demostrando la sociedad vasca", ha recalcado.

En esta línea ha hablado de la próxima Semana Santa. Urkullu ha pedido a quien esté pensando en estas fechas que "piense en el verano. No se trata de salvar semanas, sino de salvar vidas".

Así, ha recordado lo sucedido en verano del año pasado y en las pasadas Navidades con una "excesiva relajación en las desescaladas" para que no vuelva a ocurrir ahora y ha expresado su deseo de que en el seno de la Comisión Interterritorial o la de Salud Pública se alcance un acuerdo sobre las restricciones.

Por último, se ha referido al 8 de marzo y ha dado a conocer que la Ertzaintza ha recibido ya 118 comunicaciones de concentraciones y manifestaciones. Ha recordado que el de manifestación es un "derecho fundamental" y que el Gobierno Vasco no tiene "ninguna facultad" para prohibir su ejercicio, aunque ha animado a que las reivindicaciones o celebraciones con motivo del Día Internacional de la Mujer se hagan "en el ámbito municipal y con responsabilidad".

VÍDEO | Comparecencia de Iñigo Urkullu tras la reunión del LABI