Sociedad
Unicef
Los abusos-sexuales en la infancia, "un problema creciente, muy difícil de detectar"
AGENCIAS | REDACCIÓN
Isidro Elezgarai y Elsa Fuente, presidente y coordinadora de Unicef Euskadi, han participado en la ponencia del Parlamento Vasco de un estudio sobre abusos sexuales en la infancia.
Euskaraz irakurri: Haurren aurkako sexu-abusuak “gorantz doan arazoa eta detektatzen oso zaila”
El comité de Unicef de la CAV ha pedido en el Parlamento Vasco políticas y estrategias “integrales e intersectoriales” para hacer frente a los casos de abusos sexuales en la infancia. El problema cada vez es más grave y además es muy difícil de detectar y denunciar.
El presidente de Unicef Euskadi, Isidro Elezgarai, ha comparecido en la comisión dirigida a realizar un estudio sobre los casos de abusos sexuales contra la infancia, y ha aprovechado la ocasión para decir que “hay que ir construyendo rutas de acción para dar mejores respuestas institucionales” y que hay que implementar “acciones de prevención”.
La coordinadora de la entidad, Elsa Fuente, ha añadido que los abusos sexuales son una de las mayores formas de violencia contra los niños, niñas y adolescentes, ya que no son solo una violación de sus derechos, sino que también inciden directamente en el desarrollo mental y físico de la juventud.
Los representantes de Unicef han declarado que el problema es cada vez más grave: "Es un problema creciente en el mundo, que no discrimina entre países ricos y pobres, ni entre entornos rurales o urbanos".
En cuanto a la detección, desde Unicef Euskadi han dicho que los niños, niñas y adolescentes que han sufrido abusos sexuales no cumplen con un patrón de comportamiento específico, aunque hay indicadores que generan sospecha, y en caso de ser detectados se debe avisar a la autoridad competente.
Sobre las consecuencias, han manifestado que “a veces son inmediatas y en otras ocasiones no aparecen hasta años después del abuso”. En relación con esto el comité cree que los delitos deberían empezar el proceso de prescripción después de que la víctima cumpliera los 30 años.
Víctimas otra vez
Desde Unicef han dejado claro que el sistema de denuncias no es el más adecuado: cada niño declara de media cuatro veces ante diferentes profesionales. Este proceso “revictimiza” a las personas afectadas y es perjudicial para ellas.
Atender a las víctimas es llegar tarde
El comité ha añadido que atender a las víctimas es llegar tarde y ha instado a basar la prevención en crear “entornos protectores y programas educativos”.