Chivite prevé una desescalada propia y también asimétrica para Navarra

El "criterio propio pero de máxima prudencia" presidirá la actuación de Navarra en la desescalada de las medidas restrictivas para contener el avance de la pandemia de la COVID-19, que podría ser asimétrico dentro de la propia Comunidad foral según zonas y en el que se "geolocalizará de forma anonimizada" a la población para medir contactos.

Así lo ha señalado la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, en el Parlamento Foral, donde este jueves se celebra una sesión de control al Gobierno, que se ha iniciado con un minuto de silencio en memoria de las más de 400 víctimas en Navarra del coronavirus, una pandemia cuya gestión y consecuencias han centrado buena parte de las preguntas planteadas a la presidenta.

Chivite ha asegurado que su gabinete no ha dejado de dialogar con los sindicatos y la patronal y trasladado al Gobierno español las necesidades detectadas, también sobre la duración de los ERTE para dar cobertura al empleo hasta la vuela a la actividad.

Asimismo, la presidenta del Gobierno Foral ha reiterado que "Navarra está preparada" para el escenario de desescalada cuya primera fase se inicia este próximo lunes, y ha señalado que trabajan en un Plan de Reactivación Social y Económica que se pondrá en marcha una vez que finalice el proceso, a finales del mes de junio, que en Navarra está "perfectamente calendarizado".

En esa organización de la desecalada, bajo el "marco" impuesto por el Estado, Navarra trabaja para acometer "medidas que se plantean en cuatro esferas de trabajo: La sanitaria, la interdepartamental -con cada área adaptando medidas y soluciones a los sectores de su competencia-, con la aportación de la sociedad civil -esta tarde se constituye una comisión con expertos de diversas materias- y la política.