Internacional
Reunión en Moscú
Putin: "¿Si queremos guerra? Claro que no"
Agencias | EiTB Media
"Hemos sido testigos de la guerra en Europa desatada por la OTAN contra Yugoslavia", ha recordado Putin. Scholz ha discrepado con él al señalar que en Yugoslavia había una amenaza de genocidio, a lo que Putin ha respondido que lo que ocurre ahora en el este de Ucrania también es un genocidio.
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El presidente ruso, Vladímir Putin, ha afirmado que Rusia no quiere una guerra en Europa. "¿Si queremos guerra? Claro que no", ha dicho el jefe del Kremlin al comentar la tensión actual en la frontera entre Rusia y Ucrania.
"Hemos sido testigos de la guerra en Europa desatada por el bloque de la OTAN contra Yugoslavia. Una gran operación militar con bombardeos de una de las capitales europeas, Belgrado", ha afirmado.
Ha subrayado que las acciones bélicas se llevaron a cabo sin la autorización del Consejo de Seguridad de la ONU y eso "fue un ejemplo muy malo".
Scholz ha discrepado con el líder ruso al señalar que en Yugoslavia había una amenaza de genocidio, a lo que Putin ha respondido que lo que ocurre ahora en el este de Ucrania también es un genocidio.
En cuanto a las demandas de seguridad rusas planteadas a EEUU y la OTAN, Putin ha dicho que Rusia no ha recibido una respuesta constructiva, pero confía en continuar el diálogo.
A la pregunta de si Rusia continuará retirando tropas de las proximidades de las fronteras de Ucrania, el jefe del Kremlin ha indicado que dependerá de la situación.
"¿Cómo va actuar Rusia? Según el plan. ¿Y de que se compone este? De la situación real en terreno", ha dicho, para añadir: "¿Quién puede decir cómo se desarrollará la situación? Nadie, por ahora. Depende no solo de nosotros".
Por su parte, el canciller alemán, Olaf Scholz, ha afirmado que la retirada de algunas unidades militares de Rusia de las fronteras de Ucrania es una "buena señal, pero debe haber más" para rebajar la tensión.
"Que ahora escuchemos que algunas unidades serán retiradas, es una buena señal. Esperamos que haya más", ha dicho Scholz en una rueda de prensa conjunta tras reunirse con el presidente ruso, Vladímir Putin, durante unas tres horas.
"Las posibilidades diplomáticas están lejos de agotarse", ha dicho Scholz. "Debería ser posible encontrar una solución. No importa cuán difícil y grave parezca ser la situación, me niego a decir que no tiene remedio", ha agregado.
"Estamos quizás ante la crisis más difícil y amenazante en mucho tiempo en Europa", ha indicado.
Scholz ha explicado que Putin le ha informado sobre su reunión el lunes con sus ministros de Exteriores, Serguéi Lavrov, y de Defensa, Serguéi Shoigú, donde el primero le indicó que hay posibilidad de un acuerdo con EE. UU. y la OTAN sobre las garantías de seguridad que el Kremlin exige a Occidente para remodelar el sistema de seguridad de Europa.
El canciller alemán pedido que ese diálogo "no acabe en un callejón sin salida", porque "sería "una catástrofe para todos".
Casi simultáneamente la Duma rusa aprobaba un llamamiento a Putin, para que reconozca la independencia de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, en el este de Ucrania.
A favor de la resolución, presentada por el grupo parlamentario comunista, votaron 351 diputados, de los 450 que integran la Duma.
Scholz considera que la resolución adoptada por la Duma equivaldría -de hacer caso el presidente ruso- "a despreciar" los Acuerdos de Minsk para la paz en el Donbás. "Entonces el proceso estaría acabado y eso sería una catástrofe política", añadido.
Poco antes de la votación en la Duma, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, indicó que "para nadie es un secreto que la opinión pública rusa reacciona vivamente a todo lo que ocurre en el Donbás", donde se enfrentan desde 2014 los separatistas prorrusos apoyados por Moscú y el Ejército ucraniano.
Rusia ha entregado más de 700 000 pasaportes a ciudadanos de estas dos regiones.