Italia impone la vacunación obligatoria para mayores de 50 años

El Gobierno de Italia ha aprobado este miércoles por decreto-ley la vacunación obligatoria contra el coronavirus para mayores de 50 años, una medida polémica que busca aliviar la presión hospitalaria y controlar los contagios para proteger a la población. 

Además, las fuentes gubernamentales han indicado que las y los empleados públicos y privados tendrán que mostrar desde el 15 de febrero su certificado sanitario reforzado -que se obtiene solo cuando se está vacunado o se ha pasado la enfermedad- para acceder a sus puestos de trabajo. 

El resto de personas mayores de 50 años, aunque no trabajen, también tendrán que vacunarse. 

El Consejo de Ministros también ha extendido la vacunación obligatoria al personal universitario, con independencia de su edad, equiparándolo así al personal escolar, que ya lo tiene que hacer desde mediados de diciembre.

Asimismo, ha aprobado las directrices sobre cuarentenas en los colegios, para garantizar las clases presenciales desde el 10 de enero con seguridad.

"Las medidas de hoy quieren preservar el buen funcionamiento de los hospitales y, al mismo tiempo, mantener abiertas las escuelas y las empresas. Queremos frenar el crecimiento de la curva de contagios y empujar a los italianos que aún no se han vacunado a que lo hagan", ha afirmado el primer ministro, Mario Draghi, para justificar su decisión. 

"Actuamos sobre los grupos de edad que corren mayor riesgo de ser ingresados para reducir la presión hospitalaria y salvar vidas", ha añadido. 

La semana pasada, el Gobierno italiano decidió que este pasaporte sanitario va a ser obligatorio desde el 10 de enero para acceder a los medios de transporte, hoteles, ceremonias o festivales; mientras que, por ahora, se pide en el ocio y la restauración.