Clamor contra Berlusconi

Crece en Italia el clamor contra Berlusconi. Al coro de voces que le piden que se vaya se han unido ahora importantes representantes del empresariado y de la Iglesia. Emma Marcegaglia, la presidenta de Confindustria, la principal organización de empresarios, ha dicho que Italia está haciendo el ridículo en el mundo por culpa de Berlusconi y que eso afecta a la competitividad italiana.

El cardenal Angelo Bagnasco, presidente de la Conferencia Episcopal, ha dicho que el comportamiento de Berlusconi es inmoral y que, efectivamente, todo eso afecta a la imagen exterior de Italia. Es decir, empresarios y obispos, que hace no mucho eran dos de los principales apoyos de Berlusconi, le dan ahora la espalda.

Por otra parte, se multiplican las manifestaciones en la calle contra la llamada “Ley Mordaza”, que pretende poner dificultades a los medios de comunicación para investigar escándalos como los que sacuden al primer ministro italiano. Además de sus orgías sexuales, no hay que olvidar que Berlusconi está procesado por asuntos de corrupción política y económica.

Sin embargo, Berlusconi se muestra más desafiante que nunca y asegura que no se va a marchar, que si la oposición quiere que se vaya, que presente una moción de censura. Berlusconi sabe que tiene una mayoría parlamentaria suficiente, aunque muy justa, para seguir en el poder.

La Liga Norte no va a dejarle caer porque disfruta de una cuota de poder importante que, probablemente, perdería con un Gobierno distinto.