Acciona se adjudica la ampliación del metro de San Sebastián por 50 millones de euros

Acciona, en consorcio con Iza y Altuna y Uria, se ha adjudicado la construcción de un tramo para la ampliación del metro de San Sebastián por 50 millones de euros.

El contrato, licitado por el Gobierno Vasco a través de la Red Ferroviaria Vasca (Euskal Trenbide Sarea), contempla un plazo de ejecución de 36 meses, según ha indicado Acciona en un comunicado.

El tramo Miraconcha-Easo, que se enmarca dentro de la fase 2 del metro de San Sebastián, tiene 1943 metros de longitud, es en su mayor parte subterráneo e incluye las nuevas estaciones de La Concha y Easo.

La estación de La Concha se implantará en pleno casco urbano, en una zona de gran actividad comercial, cercana al centro histórico de la ciudad, entre el paseo de La Concha y la plaza del Buen Pastor.

Por su parte, la estación de Easo también será subterránea en su totalidad y se ubicará en el entorno de los barrios de Amara y Morlans, en las inmediaciones de la actual Estación de EuskoTren, con el que enlazará en su tramo final.

Acciona ha participado en la construcción de líneas de metro en ciudades de todo el mundo como Madrid, Barcelona, Bilbao, Málaga, Sevilla, Valencia, Quito, Sao Paulo, Caracas, Medellín, Hong Kong, Lisboa o Dubái.

Satorralaia convoca una protesta ante la reanudación de las obras del "topo"

El movimiento vecinal Satorralaia, por su parte, ha convocado una concentración el próximo 26 de junio para protestar por la reanudación de las obras del tramo Miraconcha-Easo de la pasante del metro de Donostialdea, que se paralizaron por los problemas técnicos derivados de la aparición de sendos socavones en la zona.

Satorralaia advierte en un comunicado de que nadie se debe llevar "a engaño", pues en su opinión el Ejecutivo Vasco y el gobierno PNV-PSE en el Ayuntamiento de San Sebastián "están actuando con absoluta temeridad ante los evidentes riesgos que conlleva la ejecución de esta obra".

Recalca además que la reanudación de las obras, adjudicadas a la UTE formada por Acciona, Iza y Altuna y Uria, "supone un reto a la voluntad expresada por una gran parte de la ciudadanía y por numerosos colectivos sociales, sindicatos y asociaciones vecinales que demandan la paralización del metro al considerar que es un macroproyecto absolutamente innecesario y un gran derroche económico".