La prima de riesgo de España baja tras la intervención del BCE

La prima de riesgo ofrecida a los inversores por los bonos italianos y españoles a diez años respecto a la deuda alemana ha experimentado un notable alivio tras los insistentes rumores difundidos por operadores sobre una "agresiva intervención" en los mercados secundarios de deuda por parte del BCE. Lo que ha permitido reducir los diferenciales de estos dos países por debajo de los 500 y los 400 puntos básicos, tras marcar máximos históricos en la apertura.

En concreto, la prima de riesgo española se relajaba hasta los 401 puntos básicos, llegando a caer momentáneamente a 397 puntos básicos, con una rentabilidad del 5,803%, tras haber llegado a marcar un récord de 424 puntos básicos.

Por su parte, el 'spread' de los bonos italianos a diez años respecto a los alemanes, que había llegado a un máximo de 573,1 puntos básicos, llegaba a bajar hasta 497,6 puntos básicos y los intereses ofrecidos se alejaban del 7%, umbral de rentabilidad considerado por numerosos analistas como insostenible.

El diario italiano 'La Repubblica' en su edición 'online' informaba citando a operadores sin identificar de que el BCE había vuelto a intervenir en los mercados secundarios de deuda para relajar las presiones sobre bonos italianos, aunque estos 'traders' describían que la intervención de la entidad emisora era "más agresiva" que en jornadas anteriores.

Las bolsas europeas cierran en números rojos por las dudas sobre Italia

Las bolsas europeas han cerrado con pérdidas, en una sesión marcada por la incertidumbre sobre el futuro del euro y el temor a que se produzca un colapso de la deuda italiana.

Al cierre, la bolsa de Madrid bajó el 0,36%, hasta los 8.310,90 puntos, mientras que la de París se dejó un 0,34% para alcanzar los 3.064,84 puntos, y la de Londres bajó un 1,92% hasta los 5.460,38 enteros.

En Italia, uno de los epicentros de la inestabilidad en Europa, la bolsa logró cerrar al alza, de manera que el FTSE MIB ganó un 0,97 % y se situó en 15.218,34 puntos, animado por la posibilidad de que el excomisario europeo de la Competencia, Mario Monti, se haga cargo del Gobierno.