La crisis del coronavirus destruirá 17.000 empleos y reducirá el PIB en un 3,6 %

La crisis del coronavirus provocará que en 2020 se pierdan un total de 17.000 puestos de trabajo y que la economía vasca se contraiga en un 3,6 %, según ha anunciado el consejero de Economía y Hacienda Pedro Azpiazu. Según esos mismos datos manejados por el Gobierno Vasco, en 2021 se volverá a una situación de crecimiento potencial, con la creación de 15.000 empleos y un crecimiento económico del 2,6 %.

La previsión inicial de crecimiento del Ejecutivo de Iñigo Urkullu previa a la pandemia estaba situada para el presente ejercicio en el 1,9% del PIB y se contaba con la creación de 11.500 puestos de trabajo, con una tasa de paro del 9,6%.

Según ha explicado Azpiazu, la situación actual de emergencia sanitaria y estado de alarma por la incidencia de la pandemia del coronavirus exige "con urgencia, una estrategia económica que haga posible y viable, en primer lugar, la financiación del gasto en salud que se precisa y, en segundo lugar, que responda a la situación de emergencia que viven las empresas y las personas".

El ejecutivo vasco tiene "muy claro", ha subrayado Azpiazu, que el objetivo es anticiparse en la medida de lo posible a todas las situaciones que puedan derivarse de la evolución del COVID-19.

Con ese objetivo, el Gobierno Vasco ha diseñado una estrategia económica de respuesta que se basa en tres vertientes:

- Asegurar la liquidez del sector público, debido a las medidas adoptadas en el ámbito tributario para favorecer la propia liquidez de las empresas.

- Aumentar los ingresos, teniendo en cuenta la evolución de la economía y su elasticidad de respuesta.

- Tomar decisiones relativas al gasto público.

Medidas adoptadas

Entre las medidas adoptadas para responder a esas necesidades están la creación el 17 de marzo del Programa Covid-19 de 300 millones de euros ampliables en otros 200 millones, la activación 525 millones de euros para líneas de financiación a interés 0 y la elevación del déficit y de la deuda pública en caso de darse una mayor caída de la actividad económica. 

Otros datos significativos aportados por el consejero con la caída en el consumo de los hogares de 4,4 puntos en media anual y de la inversión en 4,1 puntos. Lo único que sube es el consumo público, que lo hace en 4,6 puntos, impulsado en parte por las de incremento del gasto público.