Las 'concesiones dolorosas' de Merkel

Angela Merkel ya advirtió que tendría que hacer "concesiones dolorosas" para poder formar un Gobierno de coalición con los socialdemócratas de Martin Schulz, y efectivamente las ha hecho. Schulz necesitaba que el pacto incorporase varias de las medidas propuestas por los socialdemócratas, porque, si no, existía el riesgo de que los militantes del partido rechazasen el pacto en el referéndum interno que van a celebrar.

Pues bien, el nuevo Gobierno hará inversiones muy importantes en educación, vivienda y dependencia, y además propondrá aumentar los fondos europeos dedicados a ayudas sociales. Además, el propio Schulz será ministro de Exteriores, con el propósito declarado de hacer equipo con el francés Macron para avanzar hacia una mayor integración europea.

La principal concesión que ha tenido que hacer Merkel ha sido la de dar el Ministerio de Finanzas a los socialdemócratas. El ministerio que ocupó Wolfgang Schauble, el campeón de la austeridad, lo va a tener ahora Olaf Scholz, alcalde de Hamburgo y partidario de aumentar el gasto social. Muchos democristianos están criticando ya a Merkel por hacer esas concesiones. Ella lo ha hecho por responsabilidad pero, también, porque no había otra solución. O era este Gobierno y ella seguía de canciller, o eran elecciones anticipadas.