Batalla diplomática en torno a Palestina

Palestina ha decidido dar la batalla diplomática en todos los frentes internacionales. El presidente palestino, Mahmud Abbas, firmó hace dos días la solicitud de adhesión de Palestina al Tribunal Penal Internacional. Ese tribunal, con sede en La Haya, es el que dirime los litigios entre estados. Hasta hace dos años, Palestina no podía dar este paso; pero desde que Palestina fue aceptada en la ONU como Estado observador no miembro, sí lo puede hacer: ya es un Estado que puede denunciar a otro Estado. Por ejemplo, puede llevar a Israel ante el Tribunal de La Haya para denunciarle por todos los tratados internacionales que no cumple. Ahora se ve mejor la importancia que tuvo ese reconocimiento como Estado observador por parte de la Asamblea General de la ONU. No tiene todas las capacidades de un Estado miembro normal, pero sí unas cuantas. Para ser Estado miembro normal, tendría que reconocerlo el Consejo de Seguridad de la ONU, en el que Estados Unidos tiene derecho a veto. Un derecho que no dudó en ejercer hace tres días, una vez más, para impedir una resolución que exigía a Israel devolver los territorios ocupados en el plazo de tres años. La respuesta de Abbas ha sido rápida y ha abierto otro frente en la batalla diplomática.